Por: Guadalupe García García
No moriré del todo.
No olvidarás mi nombre.
En la nocturna brisa que se acerca.
Porque todo lo que sollozos crea
En la brisa de cada mañana renace.
Mi nombre sonará como canto de mar
Tus ojos mojados dejarán de llorar.
Porque en esté golpe de dolor
Llegaré en silencio a tu oído.
Llevarás en el tiempo recuerdos fugaces.
Tendrás momentos amargos y tristes.
Pero al invocar mi nombre.
Se que escucharas míos versos.
Seré tu guardia, tu compañero.
Guardaré para ti mi última alegría.
Me sentirás lejos y estaré contigo.
Mi recuerdo será tu poesía.
Guardaré para ti, mí último aliento.
Aunque muera en tus labios llevarás mi
nombre.
Sintiéndote triste, cantará en ti mi
recuerdo.
No!... Dolerá más tu
corazón triste.
Porque he de surgir cada día en tu recuerdo.
Nostalgias
Me ha despertado tu voz.
En la oscura y fría mañana.
En el tintinar de alguna estrella fugaz.
Tu recuerdo me habla.
Tras la cortina de humo que me toca.
Entre sabanas te beso y vuelve la vida.
Enamorada de un ángel.
Que viene y se queda.
Tus palabras como soles de primavera.
Miradas que nos atan al mas profundo
silencio.
Entre llanuras réncores.
La estación que nos espera.
Los caminos se extienden,
Rompiendo distancias.
Tu voz resuena en mi ventana.
El eco que he guardado te trae.
Taladra la fuerza que me detiene.
Impaciente por verte llegar.
Renazco…
En tu mirar cada vez que me miras.
Encuentro mis pasos rotos hacia ti.
Ato palabras por amarte.
Por encontrar la cura.
En esta locura de quererte
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