8 de mayo de 2009
EL PROBLEMA DE LA INFLUENZA, AFECTA A PORCICULTORES
*Se desplomaron las ventas de carne de cerdo en un 80 por ciento
*También la importación de carne congelada les afectó
Por: Marco Antonio Xaca
Huatusco, Ver.
El virus de la influenza porcina originó que la mayoría de las personas dejaran de consumir carne de cerdo ante el temor de que pudiera estar contaminada, por lo que los porcicultores de la región de Huatusco se han visto afectados en sus ventas.
David Villafuerte Cancela, propietario de la granja de cerdos Villafuerte y miembro de la asociación civil de porcicultores de la región señaló que las ventas cayeron en un 80 por ciento.
“La información que se dio al principio de influenza porcina nos afectó, aunque ahorita ya se cambió a influenza humana o americana, pero desde el momento en que se dio la noticia, la gente entro en psicosis y dejaron de consumir lo que es la carne de cerdo”.
Como ejemplo mencionó que si una granja tiene 100 vientres, entonces deja de mover un promedio de 150 puercos al mes, aunado que el peso en venta debe ser de 90 a 100 kilos, porque si el cerdo se pasa de peso es castigado también en el mercado, y con el problema de la influenza el cerdo no se vende, pero este sigue comiendo y por ende engordando lo que ocasionará pérdidas económicas.
Pero los porcicultores no solo se han visto afectados por la influenza, sino también por la importación de carne congelada que llega de otros países a la zona, ante ello, los granjeros locales tienen que salir a vender su producto fuera de la región.
“Pero lo que ocasionó que desminuyeran las ventas fue el problema de la influenza, tan es así que en esta semana no hubo venta, esto quiere decir que estamos a la expectativa de lo que pase, pero quiero exhortar a los consumidores que la carne de cerdo de la región es de calidad”.
Al preguntarle como controlan la salud de los animales; Villafuerte Cancela respondió que las granjas que tienen un buen número de cerdos que cuentan con médicos de cabecera, de igual manera los laboratorios donde compran las vacunas les ofrecen el servicio.
“Cuando detectamos un animal enfermo lo aislamos, de hecho el lechón que nace bajo de peso en la camada se sacrifica y se crema o que veamos que no es viable, pero aquí en la región no se da tanto el caso porque las granjas están limpias. Ahorita SAGARPA realizó un recorrido en todas las granjas para hacer una muestra de sangre y sacar serologias para saber si existe fiebre porcina clásica pero no se ha presentado ningún caso de este tipo”.
Finalmente, el porcicultor declaró que ante el problema que enfrentan debido a la baja venta de carne de cerdo por la situación de la influenza, decidieron hacer una alianza con el presidente de los tablajeros de esta región, Martín Vallejo, para que le den prioridad a las granjas locales a fin de evitar a los introductores.
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